No pienses que las decisiones se toman muy lejos. Las tuyas las has de tomar tú, decididamente, y ayudar a las decisiones de otros.
Buen texto para comentar en clase. ¿Cómo aplicarlo a otros ámbitos?
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La batalla de California: cómo las familias vencieron al pensamiento único
No tenían políticos, ni famosos, ni periodistas, pero ganó su defensa del matrimonio
California ha sido la mayor derrota del homosexualismo político en todo Occidente, y sin duda la victoria más ejemplar del movimiento pro-familia. Los ciudadanos han votado y han decidido que la Constitución de California especificará que sólo es matrimonio válido la unión de un hombre con una mujer.
Esta derrota no ha gustado al lobby gay en California. California era, para muchos, el paraíso homosexual en la Tierra, con ciudadades devotamente gay-friendly como San Diego (cuya alcaldía se declaró anti-Proposición 8) y San Francisco, cuyo alcalde es el mayor activista de la causa gay.
Pese a ello, el miércoles por la noche se manifestaban contra el cambio constitucional sólo 2.000 personas en Hollywood; y en Los Ángeles, frente a las oficinas de la CNN, otras 500 personas. Poca gente después de haberse gastado 30 millones de dólares contra el movimiento ciudadano en defensa del matrimonio natural.
Se debatía la Proposición 8, que el Fiscal General, el pro-gay Jerry Brown, había hecho escribir así en las papeletas: "eliminar el derecho de las parejas del mismo sexo a casarse".
Hasta esta frase era una manipulación: los defensores del matrimonio hombre-mujer habían reunido 1,1 millón de firmas para pedir el referendum que permitiese introducir en la Constitución de California la frase "sólo el matrimonio entre hombre y mujer es válido o reconocido en California".
Fue Jerry Brown, el fiscal general, activista pro-gay (declarado desde enero de 2008), fue quien en julio ordenó que las papeletas usasen la fea frase "eliminar el derecho..." ¡Sólo los malvados eliminan derechos! ¿Quién votaría a favor de "eliminar un derecho"? Jerry Brown usó ese truco sucio después de gastar todos sus otros trucos legales para que el millón de firmas no se convirtiesen en referendum. Y pese a eso, perdió.
Un poco de historia: ciudadanos tenaces contra el homosexualismo político
Ha sido una larga historia de ciudadanos contra políticos. Empezó en el año 2000, cuando los ciudadanos llevaron una proposición a referendum, la Proposición 22, que cambiaba el código de familia de California para que dejase claro que el matrimonio era una unión hombre-mujer. Votaron a favor el 61% de los electores.
Pese a ello, en 2004, el nuevo alcalde de San Francisco, Gavin Newson, apenas con un mes en el cargo, empezó a dar licencias municipales de matrimonio a parejas homosexuales con gran despligue mediático. Las fotos de bodas gays llenaron portadas de prensa favorable, y en España se usaron para abrir paso a la ley Zapatero de matrimonio gay de 2005 (sin referendum ni nada, por supuesto). Como reacción, 11 Estados de EEUU ese año cambiaron sus Constituciones declarando que el matrimonio era sólo entre hombre y mujer.
En California, el 15 de mayo de 2008, el Tribunal Supremo dictaminó (por 4 votos contra 3) que casarse era un derecho constitucional y que una ley del Código de Familia no podía limitarlo. Así, lo que un 61% de votantes había aprobado quedó anulado por cuatro jueces activistas.
Las familias, indignadas, se lanzaron a recoger firmas, ahora con un objetivo más ambicioso: un referendum en noviembre, durante las elecciones presidenciales, para cambiar la Constitución. Que es lo que han conseguido: el éxito de la Proposición 8.
A espera, tan solo, del voto por correo, los resultados son claros:
A favor de la Proposición (matrimonio hombre-mujer): 5.388.000 (52,5% de los votantes)
En contra: 4.883.000 (47,5% de los que votaron)
Véanse aquí los resultados oficiales: http://vote.sos.ca.gov/Returns/props/map190000000008.html
La campaña en defensa del matrimonio natural, llamada "Yes on Proposition ", con el lema "restaurar el matrimonio", no tenía casi apoyos políticos. La prensa estaba en contra y machacaba contra la Proposición 8. Los políticos de San Diego y San Francisco hicieron campaña contra la proposición insistentemente.
A favor de la reforma constitucional, sólo algunos políticos menores. Defendían la familia natural apenas 15 senadores. Y sólo 13 alcaldes, de ciudades medianas y pequeñas como Anaheim (330.000 h.), Corona (125.000h.), Rancho Santa Margarita (47.000 h.), Chino Hills (80.000 h.), Folsom (70.000), Cypress (50.000), Laguna Niguel (62.000), además de algunos concejales aislados.
Pese a ello, la campaña por el matrimonio natural consiguió recaudar 40 millones de dólares, aportados por 70.000 donantes individuales. Participaron 100.000 voluntarios, que visitaron casas, hicieron millones de llamadas telefónicas, distribuyeron un millón de carteles y otro millón de grandes tiras adhesivas.
La oposición, por el contrario, recaudó sólo 30 millones de dólares. La gente de a pie dio poco, y se financiaron sobre todo con actores, famosos, millonarios y los lobbies activistas. Por ejemplo:
- El lobby ultralaicista y anticristiano ACLU (American Civil Liberties Union), aportó 1,2 millones de dólares contra la Proposición 8.
- El gigante energético Pacific Gas and Electric Co., hizo una donación de 250.000 dólares contra el matrimonio natural
- La presentadora de televisión lesbiana Ellen DeGeneres aportó 100.000 dólares de su bolsillo contra la Proposición 8. Además, trajo a su programa al actual vicepresidente Biden, quien declaró "si yo viviese en California votaría contra la Proposición 8". Biden, aunque se define como "católico", es pro-aborto y pro-divorcio.
- El matrimonio de actores famosos Brad Pitt y Angelina Jolie aportaron 100.000 dólares más
- Apple, el gigante informático de los Mac, aportó otros 100.000 dólares a la campaña homosexualista
- Sergey Brin, presidente de Google, dio 100.000 dólares a la causa gay
- El billonario pro-gay Jon Stryker, de Michigan, aportó 1 millón de dólares
- La muy progresista y bien financiada Asociación de Profesores de California dio 1,3 millones de dólares
- George Lucas, director de "Star Wars", donó 100.000 dólares al Lado Oscuro de la Fuerza
- El director de cine Steven Spielberg y su esposa donaron 100.000 dólares cada uno
- El Partido Demócrata de California dedicó 100.000 euros a esta campaña... y mucho más a la campaña general
- En la semana final de campaña, el productor de Hollywood Steven Bring aportó 500.000 dólares
- El millonario de Ohio, David Maltz, habitual donante pro-gay, les dio 1,1 millones de dólares
- El actor T.R. Knight, otros 100.000 dólares
Y así con otros famosos y multimillonarios gays. El resto vino de las potentísimas asociaciones homosexuales de todo EEUU.
Respecto a la financiación del bando pro-familia, hay datos sorprendentes. Algunas fuentes calculan que el grueso del dinero vino de las familias mormonas de todo EEUU, que de forma generosa, disciplinada y como donativo religioso en junio aportaron hasta 17 millones de dólares. Fue el gran impulso inicial. Simplemente, la iglesia mormona (que no cree en la Trinidad ni en la divinidad de Jesucristo, pero son veteranos activistas pro-vida y pro-familia) se volcó de forma intensa en todo EEUU. De ahí el odio burdo de los anuncios de TV en que hacen aparecer a unos mormones con escopetas en casa de unas lesbianas rompiendo su licencia matrimonial. El miércoles por la noche las manifestaciones de gays enfadados llevaban carteles de "¡mormones, id al infierno!"
La entidad individual que más aportó fue el potente movimiento católico Caballeros de Colón. Fundado en 1882, con 1,7 millones de afiliados, echaron la casa por la ventana con una donación de 1.425.000 dólares. Hay que tener en cuenta que la Conferencia Episcopal católica de EEUU "sólo" aportó 200.000 dólares (157.230 euros, o 26 millones de pesetas).
El rico heredero y empresario evangélico Howard Ahmanson, Jr., de California, donó 1.395.000 dólares. La famosa Fundación Templeton (www.templeton.org) aportó 1,1 millones de dólares. Su actual presidente, John Templeton Jr. ayudó hace pocos años a proteger a los Boy Scouts of America de las presiones del lobby gay para homosexualizar el movimiento scout.
La National Organization for Marriage, entidad familiarista interconfesional, aportó 1.041.000 dólares. Es la principal entidad especializada en la defensa del matrimonio en EEUU, con un seguimiento legal muy eficaz del tema. La familia de Terry Caster, de San Diego, dueña de una gran empresa de alquiler de trasteros y almacenes, donó 693.000 dólares. La empresa de contenedores de Robert Hurtt, aportó 550.000. La potente asociación evangélica Focus On the Family, del reverendo James Dobson, aportó 539.000 dólares.
La American Family Association, de Tupelo, Mississippi, aportó medio millón de dólares. Otra de sus especializades es hacer exitosos boicot a McDonalds por su política homosexualista. Hace actualmente boicot a Hallmark por sus tarjetas de felicitación de bodas gays.
Claire Reiss, de Reisung Enterprises (La Jolla, California), aportó otro medio millón de dólares. Elsa Prince, viuda del fundador de Prince Automotive, donó 450.000 dólares desde Michigan. Concerned Women for America, movimiento femenino de valores bíblicos y familiares, aportó 409.000 dólares. Dorothy Nielson, una jubilada de La Verne (California), donó 150.000 dólares.
Doug Manchester, dueño de unos hoteles, donó 125.000 dólares. Fue de los primeros en hacerlo, y el lobby gay, para asustar a otros donantes, puso en marcha un boicot contra sus hoteles, ya en julio, con web propia y todo (www.boycottmanchesterhotels.com ). Hoy se ve que los donantes no se asustaron sino que se vieron reafirmados en su generosidad. Hay, luego, una docena de donantes de 100.000 dólares cada uno. Y el resto, ya son donativos más pequeños.
La clave, al final, fue la generosidad de esos 70.000 pequeños donantes, en buena parte familias o pequeñas comunidades parroquiales y cristianas.
¿Y que se hizo con todo este dinero? Televisión. Mucha televisión. Horas y horas de anuncios televisivos muy eficaces. En inglés y en español.
Un buen ejemplo de la eficacia pro-familia es el anuncio de TV para familias hispanas: la niña explica como en el colegio les narran cuentos que son adoctrinamiento gay. El vídeo puede verse en español aquí: http://it.youtube.com/watch?v=rCCdtf9zKbk .
Y una selección de los anuncios Pro-8 se pueden ver aquí: http://it.youtube.com/VoteYesonProp8 .
También fue un gran acierto el vídeo "Ya ha sucedido, en Massachussets", donde las escuelas usan materiales homosexualistas para adoctrinar a los niños acerca del matrimonio gay. Unos padres de Massachussets lo explican a los californianos.
Los defensores de la familia insistieron en el tema educativo una y otra vez: "van a adoctrinar en ideología gay a nuestros hijos en nuestras escuelas", insistieron, "es lo que ya hacen". Explicaron el caso de una profesora lesbiana que se llevó a sus alumnos a su boda gay. Explicaron que los libros de texto incorporarían ideario pro-gay al hablar del matrimonio. Y funcionó.
El voto hispano y negro fue decisivo. Fueron a las urnas, votaron a Obama... y luego especificaron que el matrimonio es hombre-mujer. Según algunos sondeos, el 90% de los negros que votaron en California lo hicieron por Obama..., pero de esos mismos negros, el 70%, votó por el matrimonio natural.
Entre los pocos actores defensores de la familia, quizá el más influyente fue Eduardo Verástegui, el guapo mexicano protagonista de Bell. Su vídeo tenía más visitas en YouTube incluso que el del famoso pastor Ricky Warren, autor de "Una vida con propósit". Colaboró con la asociación hispana "Viva la Familia". En México, unos futbolistas activistas gays llamaron a la prensa para romper su foto delante de las cámaras. Verástegui demostró ser muy valiente al desafiar al poderoso establishment de Hollywood y quizá su llamado al votante hispano fue clave para la victoria.
Un fruto hermoso será, sin duda, el respeto que los distintos grupos cristianos y religiosos han adquirido mutuamente trabajando juntos y con generosidad. Ver a los evangélicos defendiendo a los mormones de los groseros ataques de la propaganda "anti Prop-8" es un ejemplo de camaradería y, quizá, de fraternidad.
Baptistas, pentecostales, wesleyanos y metodistas, evangélicos en general, ortodoxos, católicos, adventistas, mormones, judíos... la lista de organizaciones oficialmente adscritas a la "Prop 8" en http://www.protectmarriage.com/endorsements/churches-endorsing es tan larga como incompleta. Han sido muchas más.
En la enorme alianza religiosa de California sólo los episcopalianos quedaron fuera, militando en el homosexualismo político. En zonas rurales como el condado de Alpine, los episcopalianos conservadores prefieren ahora identificarse como anglicanos, cansados de sus obispos homosexualistas.
Las iglesias lo tenían claro: el "matrimonio gay" no solo era contrario a la voluntad de Dios sino que, además, era una vía por la que se iba a multar, limitar y cerrar a las comunidades religiosas que no lo compartiesen. Cuando las agencias de adopción católicas cerraron en California para no entregar niños a parejas gays se vio claramente que mediante subvenciones, multas, etc., el Estado californiano iba a acosar a los cristianos que no compartiesen el homosexualismo político. Por ejemplo, la Unión Judía Ortodoxa (1.000 sinagogas en EEUU) avisó de que el "matrimonio gay" podía usarse para multar a las comunidades que no dejasen sus locales para bodas gays.
La batalla de las urnas ha terminado. El pueblo ha hablado... ¡otra vez! Pero el mayor líder del activismo gay en California, el alcalde de San Francisco, Gavin Newson, ya ha hecho declaraciones: espera que la decisión popular pueda anularse desde los tribunales... otra vez. El lobby contra el pueblo.
El esfuerzo y constancia de las familias y matrimonios de California, su generosidad desde el año 2000 hasta estas elecciones de 2008 son un ejemplo que hace historia en las "culture wars". Fe, familia, donaciones generosas, defensa de los niños y televisión; muchos anuncios de televisión. Una combinación ganadora.
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